En nuestras visitas guiadas en Castilla y León, no solo queremos daros a conocer nuestro rico patrimonio histórico artístico también nos gusta transmitiros nuestras tradiciones y costumbres , así como nuestro refranero castellano.
Castilla y León, tierra recia, de gente trabajadora, austera, de carácter templado y según algunos, de semblante frío y serio. Poco hablaban, porque no tenían mucho que decir.
No sé si “El hábito hace al monje”, pero en este caso, los más mayores de nuestros pueblos sí que eran parcos en palabras y usaban nuestro refranero como forma de comunicación.
Muchas veces, esas expresiones aclaraban mucho más que el significante real de la frase.
Mi madre, “castellana de pro”, de cuando Santander pertenecía a Castilla la Vieja, usa habitualmente este tipo de lenguaje y como ella dice…”A cada hachazo un roble..” y es que cada frase que usa, va acompañada de un refrán aclaratorio.
A veces, cuando se lo recordamos, no le parece bien y nos dice directamente “¡Que os den morcilla” y ya aclaro desde aquí, que eso no es nada bueno…
Cuando antiguamente se extendió entre los animales abandonados y más concretamente entre los perros, la rabia o hidrofobia, se pretendió contener esta enfermedad tan contagiosa, dando a los animales una especie de morcillas que contenían estricnina en su interior, con lo que se intentaba erradicar la transmisión. Así la próxima vez que os digan esa típica expresión referente a la morcilla, “no os la darán con queso”. Cuando el “vinotero” quería vender un vino muy malo, se lo daba a probar al tabernero junto con unos buenos trozos de queso fuerte, que tapaba cualquier sabor que pudiera tener el vino de mala calidad.
Estad atentos cuando andéis por Castilla porque “más vale prevenir que curar” y “de los errores se aprende”, no os dejéis engañar ya que “no es oro todo lo que reluce” y “aunque no hay mal que por bien no venga” “la avaricia rompe el saco”, así que “más vale pájaro en mano que ciento volando”, “pon al tiempo buena cara” y todo esto tenlo en cuenta porque “el saber no ocupa lugar” y sin dudarlo, ‘Haz el bien sin mirar a quién” porque “quién tiene un amigo, tiene un tesoro”. Siempre podrás fiarte de un castellano que dice las cosas como son, “al pan, pan y al vino, vino”, menos al frío, que lo llamamos “fresco”.
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