Una investigación sobre plantas medicinales encontró lúpulo silvestre en abundancia en las vegas de los ríos Bernesga, Torío y Órbigo. Así comenzó la historia del lúpulo como el «oro verde de León».
LA HISTORIA DEL ORO VERDE
Hacia los años 40 del siglo XX, tras la Guerra Civil y con Europa entrando en la II Guerra Mundial, para las cerveceras nacionales era dificultoso abastecerse del lúpulo alemán.
Aprovechando esta situación y las políticas de autoabastecimiento que promovía la Administración, llegó el cultivo el lúpulo a España.
En 1945 con la creación en Madrid de la Sociedad Anónima Española de Fomento del Lúpulo, las primeras iniciativas de este cultivo se concentraron en la zona norte: Galicia, Asturias, Santander, País Vasco y Navarra. Los excelentes resultados en la cosecha y la gran implicación de los cultivadores en León, colocaron a esta provincia a la cabeza del cultivo a finales de los 50.
Destaquemos que la Capilla de Santiago de la Catedral de León también honra al lúpulo. Muestra un friso de piedra tallada dónde aparecen entre otras plantas, tallos, hojas y conos del «oro verde». La influencia de Flandes, dónde el lúpulo se cultivaba desde el Siglo XIV, en la construcción de la Capilla es con total probabilidad la razón de su aparición en ella.
LEÓN, REINO DEL LÚPULO
Su cultivo se centró en las riberas de varios ríos leoneses, pero se consolidó finalmente en la Ribera del Órbigo como capital española del Lúpulo, llegando a ser una auténtica «fiebre del oro verde».
En la actualidad un nuevo impulso ha conseguido que en el año 2018 se cree el Grupo Operativo del Lúpulo. Éste engloba cultivadores, productores, comercializadores, universidades y centros de investigación, que desarrollan su actividad en las zonas lupuleras actuales. Su objetivo es claro: mejorar la competitividad de las explotaciones y ensayar con nuevas variedades, además de reutilizar los residuos.
«Lupus salictarius»
Así conocían al Lúpulo en la Antigua Roma que significa «lobo entre sauces». Es una planta trepadora que podemos encontrar en nuestros bosques de ribera y crece enroscándose en otras para buscar la luz del sol.
La riqueza del oro verde de León está en la flor
El lúpulo tiene sexos diferenciados, los machos y las hembras. Las hembras con flor de color verde claro guardan la riqueza de esta planta, la lupulina. Esta es la sustancia encargada de dar el sabor amargo y estabilidad a la cerveza.
EL CULTIVO DEL LÚPULO
La plantación del lúpulo llama la atención en la distancia por sus postes de madera de 7-8 m. de altura, además de por la alambrada para que el lúpulo trepe.
Según el calendario del lúpulo, en otoño e invierno se ara la tierra y se reparan las alambradas. En primavera el lúpulo empieza a asomar sus tallos. Podar, abonar y aplicar tratamientos para el control de plagas ocupan el tiempo hasta colocar las trepas o guías de cuerda.
Las plantas crecerán bajo los atentos cuidados de los lupuleros entre abril y mayo. Con el verano avanzado madurará la lupulina y los cultivadores se afanarán en su cosecha. Se corta la planta en la finca y se lleva a la peladora, máquina que separa la flor del resto. Tarea que antiguamente se hacía a mano.
Las flores se llevan al secadero para almacenarlas, quedando listas para su transformación. Finalmente recién estrenado el otoño se le entregará al cliente, para que lo comercialice en flor, pellet o extracto de lúpulo a las grandes y pequeñas cerveceras.
Ruta del lúpulo «oro verde»
Desde mediados del mes de junio, la localidad de Carrizo de la Ribera (León) organiza la ruta del lúpulo «oro verde». Una experiencia guiada por la historia y las características de este cultivo, además del sabor del lúpulo con cata de cervezas artesanas incluida.
Si quieres conocer todas estas historias y muchas más en León y en nuestra Comunidad Autónoma de Castilla y León, elige bien quién te guía de la mano de profesionales habilitados por la junta de Castilla y León. Ponte en contacto con nosotras y sabremos como asesorarte.